Un buen caldo de pescado es el alma de muchos platos de nuestra cocina. Ya sea para una paella, una sopa o un arroz meloso, tener esta base preparada te ahorrará tiempo y elevará el sabor de tus recetas. Hoy te explico cómo prepararlo en casa de forma fácil y rápida, con ingredientes sencillos y un resultado lleno de matices marinos.
Si te gustan los platos con sabor a mar, te animo a probar esta sopa de pescado con arroz o este delicioso arroz caldoso de rape y langostinos, perfectos para sacar partido a este caldo casero. ¡Vamos con la receta!
Aunque no lo creas, esta es la parte más esencial de cualquier receta. Pela la zanahoria, limpia el puerro, el apio y la cebolla. Trocea todas las verduras y asegúrate de que la espina del pescado esté limpia. Prepara los ingredientes con antelación y ganarás tiempo y organización en tu cocina. ¡Empezamos!
Comenzamos lavando bien las verduras y las colocamos en una olla junto con la espina del pescado. Cubrimos todo con agua fría para permitir una buena extracción del sabor durante la cocción. Si vas a usar este caldo como base para otra elaboración, como una paella de pescado, este paso es clave para lograr un fondo con auténtico carácter marinero.
Encendemos el fuego a temperatura alta hasta que el caldo rompa a hervir. Luego, lo bajamos a fuego medio para mantener una cocción suave y constante. Es habitual que aparezca espuma en la superficie. Retírala con una espumadera para lograr un resultado limpio y sin impurezas.
Deja que el caldo se cocine durante unos 30 minutos a fuego medio-bajo. Este tiempo es suficiente para que los vegetales y el pescado liberen todos sus aromas, creando una base rica en matices. No es necesario alargar la cocción, ya que un exceso puede amargar el resultado final.
Pasados los 30 minutos, colamos el contenido de la olla con un colador fino. Así obtendrás un líquido limpio, claro y lleno de sabor. Esta base es perfecta para usar en arroces, sopas o cualquier plato de marisco.
¡Y listo! Ya tienes un caldo de pescado casero, rápido y sabroso, que puedes utilizar de inmediato o guardar para futuras recetas. Puedes congelarlo en porciones si lo prefieres, así tendrás siempre a mano una base perfecta para cocinar.
Dedicar 30 minutos a preparar un buen caldo de pescado casero es una inversión de sabor para toda la semana. Con ingredientes sencillos y una preparación sin complicaciones, puedes conseguir una base deliciosa que transforme tus arroces, sopas o guisos en platos memorables.
¿No sabes por dónde seguir? Te proponemos dos ideas irresistibles para usar este caldo: prueba este arroz con almejas y gambas, lleno de aromas marinos, o déjate sorprender por el arroz meloso con pulpo y gambas, perfecto para los días en que buscas algo más especial. ¡Sigue cocinando con La Fallera y descubre todo lo que puedes hacer con un buen fondo casero!