¿Alguna vez has querido preparar un arroz que deje a todos con la boca abierta? El arroz con magret de pato es ese plato que transforma un domingo cualquiera en una celebración.
Hoy quiero enseñarte cómo hacer este arroz meloso paso a paso. Si te gusta cocinar y disfrutar de la buena mesa en familia, esta receta es para ti.
Y si te atraen los sabores intensos del mar o buscas más ideas para tu menú de domingo, te recomiendo que eches un vistazo a este arroz caldoso con mariscos o pruebes el irresistible arroz meloso con sepia y gambas. ¿Te animas a sorprender en tu próxima comida? Sigue leyendo, y verás lo fácil que es llevar este plato a tu cocina con el arroz redondo La Fallera.
Antes de comenzar a cocinar, es importante tener todos los ingredientes listos. Esto no solo facilita el proceso, sino que también mejora el resultado final del arroz.
Limpia bien las alcachofas retirando las hojas más duras y córtalas en cuartos, reservándolas en agua con limón para que no se oxiden. Los champiñones Portobello deben limpiarse con un paño húmedo y cortarse en láminas gruesas para conservar su textura.
Ralla la cebolla y el tomate por separado. Esto ayudará a que el sofrito quede suave y bien integrado. Infusiona las hebras de azafrán en un poco del caldo de ave caliente para potenciar su aroma y color.
Haz unos cortes superficiales en la piel del magret de pato en forma de rejilla, lo que permitirá que se dore uniformemente y suelte su grasa. Por último, calienta el caldo de ave y ten a mano el arroz redondo La Fallera, que será la base perfecta para este plato meloso.
Coloca el magret de pato con la piel hacia abajo en una sartén. Enciende el fuego al mínimo y deja que se cocine durante unos cinco minutos. Verás cómo la grasa comienza a fundirse poco a poco, dejando la piel dorada y crujiente.
Pasado ese tiempo, dale la vuelta con cuidado y cocina el otro lado también cinco minutos a fuego suave. Una vez dorado por ambos lados, retíralo y resérvalo. Este paso es clave para conseguir una carne jugosa y sabrosa, que luego dará un toque excepcional al arroz.
En la misma sartén donde has cocinado el magret, retira parte de la grasa si es excesiva y añade los champiñones Portobello previamente laminados. Cocínalos a fuego medio hasta que se doren por ambos lados.
Cuando estén listos, retíralos y resérvalos. Este proceso ayuda a que los champiñones mantengan su textura y aporten su sabor terroso al arroz sin soltar demasiada agua.
Usando la misma sartén, añade un poco más de AOVE si es necesario y coloca las alcachofas bien escurridas. Cocínalas a fuego medio-alto hasta que se doren ligeramente por fuera y estén tiernas por dentro.
Una vez listas, retíralas y resérvalas junto con los champiñones. Este paso es fundamental para que las alcachofas conserven su sabor y no se deshagan durante la cocción del arroz.
En la misma sartén, añade un poco de AOVE si es necesario y sofríe la cebolla rallada a fuego medio hasta que esté bien pochada. Luego, incorpora el tomate rallado y cocina removiendo hasta que se evapore todo el agua y consigas una textura densa y sabrosa. Justo en ese momento, añade las dos cucharaditas de pimentón de la Vera y remueve rápidamente para integrarlo sin que se queme. Este paso es clave para lograr un arroz con carácter y profundidad de sabor.
Vierte el caldo de ave caliente en la sartén, con cuidado de no salpicar. A continuación, incorpora los champiñones, las alcachofas y la infusión de azafrán que habías preparado previamente.
Remueve suavemente para repartir los ingredientes por toda la base y deja que el conjunto hierva unos minutos. Este paso permitirá que todos los sabores comiencen a mezclarse antes de añadir el arroz.
Añade el arroz redondo La Fallera al centro de la sartén y repártelo de forma uniforme sin remover demasiado. Cocina a fuego medio durante unos 16 a 17 minutos, controlando que el arroz no se pase y mantenga una textura melosa.
Durante la cocción, vigila el nivel de líquido y ajusta si fuera necesario. El arroz debe quedar jugoso pero sin exceso de caldo, perfecto para comer con cuchara y disfrutar de todos los matices del plato.
Mientras el arroz termina de cocerse, coloca el magret de pato en el horno a baja temperatura para que se mantenga caliente y jugoso. Cuando esté listo, sácalo y córtalo en lonchas finas con un cuchillo bien afilado.
Distribuye las lonchas sobre el arroz recién apagado. Si quieres realzar aún más el sabor, puedes añadir un toque de sal en escamas justo antes de servir.
Apaga el fuego y deja que el arroz repose durante 2 o 3 minutos. Este pequeño descanso permite que el arroz asiente los sabores y alcance la textura melosa perfecta.
Ya solo queda preparar la cuchara y disfrutar. Este plato es perfecto para compartir en buena compañía y celebrar el arte de cocinar con gusto y tradición.
Preparar un arroz con magret de pato es mucho más sencillo de lo que imaginas. Con ingredientes bien seleccionados y una cocción atenta, puedes lograr un plato que sorprenda por su sabor y textura. Cada paso, desde el marcado del magret hasta la cocción melosa del arroz, suma para conseguir un resultado excepcional.
Si te ha gustado esta propuesta, te animo a seguir explorando otras recetas como esta paella de pato o este delicioso arroz caldoso con bogavante. Cocinar con La Fallera es una forma de mantener viva la tradición y disfrutar de lo mejor de nuestra gastronomía en casa.