Arroz con nécoras: receta tradicional

Elaboración

• Inicio perfecto: Preparación meticulosa de ingredientes

• Antes de encender la cocina, organiza y prepara todos los ingredientes necesarios. Este método, conocido como «mise en place», es fundamental para garantizar un flujo ininterrumpido en la cocina, permitiendo concentrarte completamente en el arte de cocinar sin distracciones por falta de preparación.

  

• Primeros pasos aromáticos: Infundiendo el aceite con esencia de gambón

• El primer contacto del gambón con el aceite de oliva caliente es crucial, ya que libera sabores intensos que serán la base aromática de nuestro plato. Este proceso no solo enriquece el aceite, sino que también establece un fondo gustativo robusto para los ingredientes que seguirán.

   

• El corazón del sabor: Creando un sofrito vibrante

• La magia comienza con el sofrito; la combinación de cebolla y pimientos cocidos lentamente hasta alcanzar la caramelización perfecta. Este es el momento de añadir el pimentón y el tomate, cuyos sabores se intensifican al reducirse, formando una base rica y compleja para el arroz.

  

• Fusión de ingredientes: Sepia y arroz en perfecta armonía

• Después del sofrito, introduce la sepia, permitiéndole dorarse y absorber los jugos del sofrito. La adición de arroz en este punto es clave, ya que se nacara, o tuesta ligeramente, absorbiendo los sabores profundamente antes de ser bañado en el caldo y la infusión de azafrán.

  

• Punto culminante: Cocción meticulosa del arroz

• Es el momento de verter el fumet caliente y ajustar los sabores con sal, dejando que el arroz se cocine lentamente, absorbiendo cada nota de sabor. Esta etapa es vital para conseguir un grano perfectamente cocido que refleje los matices de cada ingrediente.

  

• Toques finales: Gambón y nécoras como corona del plato

• Al aproximarse el final de la cocción, adorna tu creación con colas de gambón y nécoras, integrándolos con delicadeza para que se calienten pero manteniendo su textura jugosa. Esta última adición no solo aporta un contraste de texturas sino que también presenta el plato de manera espectacular.

  

• Arte final: Emplatado estético y apetecible

• El emplatado es tanto un arte como una ciencia. Distribuye el arroz de manera uniforme en platos planos, centrando las nécoras y colas de gambón como protagonistas visuales. Asegúrate de que cada plato tenga un equilibrio de colores y texturas, y decora con un toque de perejil fresco o rodajas de limón para un contraste fresco. Este paso no solo realza el sabor, sino que también convierte cada servicio en una experiencia visualmente atractiva, prometiendo un deleite tanto estético como gustativo.

  

   

Conclusión

La receta de arroz con nécoras es un ejemplo clásico de cómo los sabores del mar y la tierra se pueden combinar armoniosamente para crear un plato que es tanto nutritivo como festivo. Este plato no solo ofrece una experiencia culinaria rica en sabores y texturas, sino que también permite adaptabilidad en cuanto a ingredientes, lo que lo convierte en una opción perfecta para cualquier ocasión especial.

En términos de preparación y presentación, el arroz con nécoras destaca por su capacidad para integrar diversos componentes gastronómicos en una sola cazuela. Con cada paso meticulosamente planificado, desde el sofrito hasta el emplatado final, este plato se erige como una celebración de la cocina mediterránea, capaz de cautivar tanto a los paladares más exigentes como a aquellos que buscan redescubrir los clásicos de siempre.